Para la economía social, las elecciones del próximo 9 de junio tienen una especial relevancia. Hay que tener en cuenta que el 60 por ciento de las decisiones que afectan a los Estados miembros surgen de los organismos europeos. En la Unión Europea, el sector de la economía social cuenta con alrededor de 2,8 millones de organizaciones y entidades que generan entre el 6 % y el 8 % del PIB de la UE y aportan a la economía más de 13 millones de puestos de trabajo, lo que supone el 6,3 % del empleo.
El periodo legislativo 2019-2024 para la economía social en la Unión Europea ha representado un salto cualitativo y cuantitativo enorme. Se han desarrollado múltiples iniciativas y medidas, como por ejemplo el Plan de Acción Europeo para la Economía Social, que están permitiendo conformar un ecosistema de emprendimiento muy favorable para la economía social que va a permitir importantes avances para estas entidades en Europa en los próximos años. A estos hitos ha contribuido de forma significativa la posición de unión y fuerza de las organizaciones empresariales de economía social europea representadas por Social Economy Europe.
Otro de los avances más recientes que marca la agenda de trabajo de las Instituciones Europeas es la Recomendación del Consejo de la UE de noviembre de 2023 sobre economía social, avances sin duda importantes en los que hay que profundizar para reforzar el sector. La Confederación Empresarial Española de la economía social (CEPES) ha elaborado una propuesta para la próxima legislatura europea basada en la concepción de que las empresas de la economía social son un actor importante para el progreso económico y social de Europa.